Mes Nacional de la Prevención de la Esclavitud y Trata de Personas

Esta traducción se proporciona como una cortesía y únicamente debe considerarse fidedigna la fuente original en inglés.

POR EL PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

UNA PROCLAMACIÓN

Nuestra Nación luchó con el problema de la esclavitud de una manera que casi nos destrozó: su noción fundamental está en contradicción directa con nuestra premisa fundacional de que todos somos iguales. Los valientes individuos que rechazaron tal crueldad nos ayudaron a superar uno de los capítulos más dolorosos de nuestra historia mientras trabajábamos para hacer realidad la promesa de igualdad y justicia para todos. Pero hoy en día, en muchos lugares del mundo -incluso aquí en Estados Unidos- la injusticia de la esclavitud moderna y de la trata de personas todavía desgarra nuestro tejido social. Durante el Mes Nacional de la Prevención de la Esclavitud y la Trata de Personas, estamos determinados a iluminar todos los rincones oscuros donde la trata de personas sigue amenazando los derechos y libertades fundamentales de los demás.

Desde fábricas y burdeles hasta granjas y minas, millones de hombres, mujeres y niños en Estados Unidos y en todo el mundo son explotados por sus cuerpos y su trabajo. Ya sea a través de la violencia, el engaño o las promesas de una vida mejor, algunas de las poblaciones más vulnerables entre nosotros -incluyendo migrantes y refugiados que huyen de conflictos o desastres, jóvenes LGBT sin hogar, mujeres y niñas nativas de Alaska y nativas americanas, y niños pobres- son víctimas de los traficantes de seres humanos. Para librar al mundo de la esclavitud moderna debemos hacer todo lo posible para combatir estas violaciones de la decencia humana.

Estados Unidos ha proseguido sus esfuerzos para enfrentar estos crímenes y ayudar a las personas que han sufrido indecibles abusos a manos de los traficantes. A través del Equipo de Trabajo Interagencial para Monitorear y Combatir la Trata de Personas, nos hemos unido al sector privado, las comunidades religiosas, las autoridades del orden público y los defensores para coordinar los esfuerzos a fin de prevenir el tráfico y proteger a las víctimas. Al centrarse en una agenda que prioriza los servicios a las víctimas, el imperio de la ley, la adquisición de suministros y el aumento de la conciencia pública, el Equipo de Trabajo ha reforzado los esfuerzos federales para poner fin a la trata de personas. En 2012, promulgué una Orden Presidencial para fortalecer las protecciones contra la trata de personas en la contratación federal, y hace casi un año firmé una legislación que fortalecía nuestra capacidad de impedir que los productos fabricados con trabajo forzado, incluido el trabajo infantil, entraran en los mercados estadounidenses.

Debemos abordar las consecuencias de la trata de personas y trabajar para afrontar las raíces de sus causas fundamentales. El pasado año fiscal, el Departamento de Salud y Servicios Humanos y el Departamento de Justicia proporcionaron más de US$ 60 millones a organizaciones comunitarias y equipos de trabajo para ayudar a las víctimas de la trata de personas, y desde el comienzo de mi Gobierno hemos casi triplicado el número de víctimas conectadas a los servicios. El Departamento de Seguridad Nacional también ha adoptado medidas para racionalizar los procedimientos de inmigración para las víctimas de la trata y garantizar que sus reglamentos sean compatibles con la legislación vigente. Y a través de las nuevas regulaciones de la Ley de Víctimas de Delitos, los fondos federales ahora se pueden usar para ayudar a las víctimas de la trata con la obtención de viviendas. A través del Consejo de la Casa Blanca sobre Mujeres y Niñas, hemos trabajado para abordar la conexión que lleva del abuso sexual a la prisión, que afecta desproporcionadamente a aquellos especialmente vulnerables al tráfico sexual, incluyendo mujeres jóvenes y niñas de minorías. Y el Consejo Asesor de Estados Unidos sobre la Trata de Personas -compuesto por 11 supervivientes de la trata de personas de diversos orígenes y experiencias- publicó recientemente su primera serie de recomendaciones para combatir la trata de personas y mantener las perspectivas de los supervivientes en mente.

Cada acción que realizamos en casa, desde la ropa que usamos hasta la comida que comemos, está conectada con lo que sucede en todo el mundo. Como Nación, hemos trabajado para abordar el problema del trabajo forzado en nuestras cadenas de suministro, y como individuos, debemos esforzarnos por ser consumidores conscientes. Al trabajar con nuestros amigos y aliados, hemos convertido este problema en una prioridad internacional. Solamente en este año utilizamos foros multilaterales, incluyendo la Cumbre de Líderes de Norte América, la Cumbre de Asia Oriental y las Naciones Unidas, para crear conciencia y trabajar con socios de todo el mundo. Además de instar a otros países a que desarrollen y amplíen sus leyes y servicios contra la trata de personas, también estamos intensificando nuestra asistencia externa en esta área. Al trabajar junto a la comunidad internacional, hemos visto aumentos significativos en los procesamientos y condenas de trata y hemos hecho grandes progresos en el apoyo a las víctimas.

Como líderes en el compromiso global de poner fin a la explotación de los seres humanos con fines de lucro, debemos recordar siempre que nuestra libertad está ligada a la libertad de los demás. Este mes, encontremos inspiración en el progreso de Estados Unidos hacia la justicia, la oportunidad y la prosperidad para todos y reafirmar nuestra promesa de continuar luchando por los derechos humanos en todo el mundo.

POR LO TANTO, YO, BARACK OBAMA, Presidente de Estados Unidos de América, en virtud de la autoridad que me confiere la Constitución y las leyes de Estados Unidos, proclamo enero de 2017 como Mes Nacional de la Prevención de la Esclavitud y la Trata de Personas, culminando en la celebración anual del Día Nacional de la Libertad el 1º de febrero. Insto a los negocios, a las organizaciones nacionales y comunitarias, a las familias y a todos los estadounidenses a reconocer el rol vital que debemos desempeñar para poner fin a todas las formas de esclavitud y conmemorar este mes con los programas y actividades apropiados.

EN FE DE LO CUAL, firmo este día veintiocho de diciembre, en el año de nuestro Señor dos mil dieciséis, y de la Independencia de Estados Unidos de América doscientos cuarenta y uno.

BARACK OBAMA

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